1958 Bernard Herrmann: Vertigo
En el periodo de diez años transcurridos entre 1955 y 1965 podemos
encontrar algunos de los títulos más interesantes de toda la extensa
filmografía de Alfred Hitchcock. Pero, además de ser grandes obras maestras de
la historia del cine, algo que tienen en común las películas de este periodo es
contar con la música de uno de los mejores compositores de la historia del
cine: Bernard
Herrmann.
Este periodo
también fue el más experimental para Hitchcock, especialmente en títulos como “Vértigo”, “Psicosis” o
“Los Pájaros”, un cine muy innovador, sin dejar
de ser muy comercial, como muy innovadora fue la música que acompañaba a estos
títulos.
Y, aunque todos
conocen (incluso quienes no han visto la película) los miles de veces
homenajeados y parodiados acordes de violín de “Psicosis”, para mí, la mejor
banda sonora en este periodo es la de la mencionada “Vértigo”, una maravilla a
la altura de semejante obra maestra.
La relación entre
Hitchcock y Herrmann no siempre fue muy cordial, hasta que acabó
definitivamente durante la preparación de “Cortina
Rasgada”, pero en “Vértigo” los dos genios congeniaron como nunca,
comprendiendo el músico perfectamente lo que el cineasta tenía en mente y
quería transmitir en su película. Desde los impactantes títulos de crédito
diseñados por Saul Bass, la música nos atrapa y trasmite ese sentimiento de
tensión y agobio que produce el padecimiento que da título a la película,
repitiendo una serie de notas que nos recuerdan a esas espirales que vemos
constantemente en varios momentos.
Pocas veces, la
música ha estado tan acorde a las imágenes como en “Vértigo”, con tensión
cuando es necesario y una maravillosa música romántica cuando los protagonistas
lo necesitan. Una auténtica genialidad compuesta en apenas un mes y grabada en
Viena, a causa de una huelga de músicos en Estados Unidos que impidió a
Herrmann grabar con su orquesta habitual.
En 1958 se publicó un vinilo con tan solo 34 de los 74 minutos de música que Bernard Herrmann compuso para la película (con los temas que podéis leer más abajo). Posteriores reediciones han recuperado esa música no publicada en su momento, así como piezas de música clásica escuchadas en la película.
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