1964 The Last Man On Earth (El Último Hombre Sobre La Tierra) Ubaldo Ragona & Sidney Salkow
Anthony Hinds, hijo de uno de los fundadores de la mítica productora
británica Hammer Films, compra en 1958 los derechos para adaptar la novela
postapocalíptica de Richard Matheson “Soy Leyenda”, publicada cuatro años
antes. El propio Matheson es quien adapta su novela a guion cinematográfico,
pero la censura británica no lo aprueba y Hinds se ve obligado a vender el
guion a una productora estadounidense.
En un principio, a Matheson le prometen que Frtiz Lang dirigirá la
película, lo cual alegra mucho al escritor. Pero, más tarde, la productora
decide no invertir tanto en la película descartando al maestro del cine
expresionista alemán y trasladando el rodaje a Italia, además, su guion original
se modifica considerablemente y Matheson, decepcionado, decide utilizar un
seudónimo (“Logan Swanson”) para que, sin dejar de cobrar por su trabajo, su
nombre no aparezca en los créditos de la película.
Tampoco a Matheson le gustó la idea de que Vincent Price la protagonice,
aunque admira al actor, piensa que no encaja en la descripción del personaje
que se da en la novela. A pesar de todo este descontento, Matheson considera
esta primera adaptación de “Soy Leyenda” como la más fiel a la novela de todas
las que se han realizado.
Independientemente de su fidelidad a la novela (algo a lo que no le doy tanta importancia), “El Último Hombre Sobre La Tierra” es una gran película que combina acción y terror al más puro estilo de este género que predomino la década de los ’60, demostrando una vez más que, el bajo presupuesto poco tiene que ver con el resultado final. Con un espléndido Vincent Price en la que muchos críticos consideran como una de las mejores interpretaciones de toda su carrera.
“Soy Leyenda” se ha adaptado en cuatro ocasiones más: el cortometraje español de 1967 considerado (este sí, Matheson nunca lo pudo ver para opinar al respecto) como la mejor adaptación de la novela; “The Omega Man”, protagonizada por Charlton Heston en 1971 y de la que hablaré próximamente en esta sección del blog; y dos más estrenadas en 2007, la protagonizada por Will Smith y un auténtico y horrible disparate rodado para televisión aprovechando el éxito de ésta última y titulado “I Am Omega”.
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