1981 Journey: Don’t Stop Believin’

De las distintas formaciones que ha tenido la banda Journey, por la que han pasado un total de cinco cantantes principales desde su formación en 1973, fue sin duda alguna, la etapa de Steve Perry, la que mejores discos nos regaló y la que más éxitos aportó a la banda.

Es en esta etapa cuando Journey publica uno de sus mejores y más reconocidos discos: “Escape”. Publicado en 1981, y cuyo segundo single es su tema más conocido: “Don’t Stop Believin’”.

Todo un himno acerca de la perseverancia a la hora de luchar por nuestros sueños que destaca por su curiosa y nada comercial estructura: mientras que la mayoría de la música comercial suele alternar un verso con el estribillo, “Don’t Stop Believin’” repite tres versos diferentes separados por partes instrumentales para sólo cantar el estribillo al final de la canción. Una estructura como decía, nada comercial, pero que se convirtió en uno de los singles más vendidos de los ’80 y el mayor éxito de Journey.

Steve Perry afirmaba acerca de la parte de su letra en la que dice “Born and raised in South Detroit” que era consciente de que no existe un distrito en Detroit llamado así, pero que al cantarla quedaba mejor que decir “North”, “East” o “West”. De todos modos, en sus conciertos, Journey suele cambiar esta parte por el nombre de la ciudad en donde estaban tocando.

A finales de la primera década de este siglo, “Don’t Stop Believin’” volvió a tener una gran popularidad, primero en 2007, gracias a su aparición en la mítica última escena de la serie “Los Soprano”, una escena que, en mi opinión, es toda una lección de cómo hacer cine y que consiguió que se me pongan los pelos de punta cada vez que escucho la canción y la recuerdo. Más tarde, en 2009, por la versión que se hizo de ella por parte de los protagonistas de la serie musical “Glee”. Gracias a ambas series, las descargas online de la canción se multiplicaron.

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