The Chiffons vs. George Harrison

Pocos meses de anunciarse la ruptura de The Beatles, se publica el primer álbum de un beatle en solitario: “All Things Must Pass”, de George Harrison. De los 23 temas que lo componen, su primer single sigue siendo el tema postbeatle más conocido de Harrison, el espiritual “My Sweet Lord”.


Un año más tarde, la discográfica Bright Tunes denuncia a Harrison y su productora alegando que el tema era un plagio de “He’s So Fine”, canción compuesta por Ronnie Mack para The Chiffons en 1963.



Harrison trata de explicar que nunca intentó copiar a nadie, que el parecido entre los dos temas era una simple casualidad.

En 1971, la cantante country Jody Miller lanza una versión de “He’s So Fine” que incluye la letra original y el riff de guitarra de “My Sweet Lord”, algo que no ayudó nada a Harrison en su defensa, ya que no hacía más que resaltar ese parecido.


El juicio no se lleva a cabo hasta 1976. Aunque el juez reconoció que Harrison nunca pretendió copiar a nadie, le da la razón a Bright Tunes y éste tuvo que pagar más de medio millón de dólares a la productora. En su álbum de aquel año, “Thirty Three & 1/”, Harrison incluye el tema “This Song”, en el que se defiende de esta acusación de un modo irónico e incluso pone ejemplos de otras canciones que incluyen los mismos acordes.


Comentarios

Entradas populares